June 02,2022

PC sin Misterios

by Marcel Lundberg

El teclado es el dispositivo de entrada de datos por excelencia. Gran parte del trabajo realizado en un ordenador se realiza a través de este dispositivo, por eso merece la pena conocerlo a fondo.

Se pueden clasificar según su forma, funcionamiento o conectividad.

Por su forma los tenemos normales, ergonómicos, multimedia, flexibles, proyección:

Ergonómicos: Usan una forma natural y confortable para las muñecas sin necesidad de ponerlas rígidas en posición poco natural.

Multimedia: suelen incorporar más teclas de acceso directo a aplicaciones. Incluso añaden pantallas lcd de pequeño formato o módulos que amplían las capacidades del teclado.

Flexibles: recubiertos de goma o silicona permiten enrollarse y son resistentes al agua, al polvo, a golpes y caídas. Resultan ideales para entornos de trabajo al aire libre.

Proyección: pensado para dispositivos móviles que no tienen teclado incorporado como tablets o smartphones.

En cuanto a la conectividad, generalmente son USB sustituyendo las antiguas conexiones DIN o mini-DIN (más conocidos com PS/2).

Sin embargo también hay teclados inalámbricos a través de tecnologías Bluetooth o por radiofrecuéncia. La principal ventaja es la ausencia de los incómodos cables. Ideales para ordenadores de salón o centros multimedia donde el pc está conectado al televisor y controlamos su uso sentados cómodamente desde el sofá.

Por su funcionamiento distinguimos tipos bien diferenciados. Los teclados cúpula de goma, de membrana, capacitivos y mecánicos.

Los teclados de cúpula de goma son un tipo de teclado, en el que cada pieza se sitúa sobre una membrana de este material con un centro compuesto por carbono. Al pulsar sobre ellas, la goma baja y el carbono contactan con la parte metálica de la matriz, produciendo un efecto llamado rebote que equivale a la pulsación repetida de la misma tecla. Los teclados más populares emplean teclas de «cúpula de goma». Las teclas reposan sobre una cúpula fabricada en goma, de pequeño tamaño y gran flexibilidad, con un centro rígido de carbono.

Cuando se realiza una pulsación, una pieza colocada bajo la superficie de la tecla hunde la cúpula. Esto hace que el centro de carbono se hunda también, hasta tocar una pieza metálica situada en la matriz de circuitos. Mientras la tecla permanezca pulsada, el centro de carbono cerrará el circuito apropiado. Cuando la tecla se libera, la cúpula de goma vuelve a su posición original, y el centro de carbono deja de cerrar el circuito asociado a la tecla. Como consecuencia, la tecla también vuelve a su posición original, quedando lista para volver a ser presionada.

Estos teclados resultan económicos y, además, presentan una excelente respuesta táctil. Otra ventaja se centra en su gran resistencia al polvo y la suciedad, ya que las cúpulas de goma aíslan los interruptores.

Otro tipo de teclados son los de membrana. Estos se asemejan a los de cúpula de goma en su forma de operar. Sin embargo, en lugar de emplear una cúpula de goma independiente para cada tecla, se basan en una única pieza de goma, que cubre todo el teclado y contiene un abombamiento para cada tecla.

Estos teclados no se encuentran con facilidad en el mundo de los ordenadores personales, ya que ofrecen una respuesta táctil inapropiada. En cambio, gracias al gran aislamiento al que se somete la matriz de circuitos, estos teclados se emplean habitualmente en sistemas sometidos a condiciones extremas.

Los capacitivos tiene un recorrido de teclas muy pequeño y por ello tienen un diseño fino y elegante. Suelen ser más resistentes que los teclados de membrana o mecánicos y mucho más fáciles de limpiar.

Cada tecla está provista de un muelle, que asegura el retorno a su posición original tras una pulsación. Bajo la superficie de cada tecla se halla una pequeña placa metálica. Bajo dicha placa, a una cierta distancia, se halla otra nueva placa metálica. El conjunto de dos placas metálicas separadas por un material dieléctrico (el aire, en este caso) no es más que un condensador. La capacidad de dicho condensador varía en función de la distancia entre las placas. Por tanto, al pulsar la tecla (y por tanto acercar las placas), se produce un cambio de capacidad que sirve para detectar la pulsación de la tecla.

El coste de estos teclados es elevado pero, por otro lado, se deterioran muy poco. Esto último les permite gozar de una larga vida, mayor que la ofrecida por cualquier otra tecnología de teclados. Ya que las dos placas nunca entran en contacto directo, no existen rebotes, lo que supone otra ventaja importante.

Sobre los teclados mecánicos, las teclas se dotan de un resorte, y cada circuito se cierra por el contacto directo entre dos placas metálicas. Otra variante introduce un material esponjoso entre las dos placas.

En general, esta tecnología proporciona una buena respuesta táctil. El problema reside en que los contactos se deterioran rápidamente, ya que no existe una barrera aislante que proteja la matriz de contactos, como en los teclados de membrana o cúpula de goma.

¿Pero qué es eso de los teclados mecánicos?

Puede que los más jóvenes no hayan tenido la oportunidad, pero creo que la mayoría de vosotros seguramente habéis utilizado esta clase de teclados hace bastantes años, incluso sin ser conscientes. Me refiero a los clásicos teclados color crema, muy ruidosos y toscos. Esos que tenían ciertas teclas de un color que no se podía definir si gris/verde/marrón. Tengo en mente especialmente el IBM model M, uno de los más famosos y por muchos considerado el mejor teclado del mundo.

Por lo costoso que resulta la fabricación de este tipo de teclados, donde las únicas maneras de abaratar un poco los costes se resumía en las carcasas y sus plásticos, se popularizó la fabricación mediante los ahora convencionales teclados de membrana, bajando enormemente la calidad de estos en pro de la reducción de costes. Dejando a escritores, gamers y a otros tantos gurús de la programación como marginados usuarios de estos “obsoletos” teclados tan oldfashion.

¿Cómo funcionan los teclados de membrana?

En la Wikipedia los definen más o menos como un teclado cuyas teclas no están separadas con partes móviles como ocurre con la mayoría de los otros teclados, sino más bien son almohadillas de presión que tienen esquemas y símbolos impresos en una superficie plana y flexible. Muy poca, o ninguna, retroalimentación táctil se percibe cuando se utiliza un teclado como este, y escribir sin errores a ciegas es difícil.

Puede que así simplemente no lo entendamos del todo, por lo que os explico un poco su funcionamiento. Está compuesto por dos capas de conductor, los cuales forma el circuito, y en la parte superior existe una membrana, normalmente formando una cavidad con sección esférica, pero no necesariamente. La activación se produce cuando la membrana es presionada y empuja las dos capas de conductor que cierran el circuito y registran la pulsación.

Como ya hemos dicho, son teclados muy económicos de fabricar. Es la técnica de fabricación que se suele utilizar en productos industriales. Permiten crear teclados con un perfil extremadamente fino, haciéndolos así muy versátiles.

Tienen una vida aproximada de 5.000.000 de pulsaciones, que se dice pronto pero es bastante.

¿Cómo funcionan los teclados mecánicos?

Teclados mecánicos utilizan interruptores completos e individuales debajo de cada tecla. Cada interruptor se compone de una base, un muelle, y un vástago. Dependiendo de la forma de este último, presentan diferentes tipos de accionamiento y recorrido. Dependiendo de la resistencia del muelle, se requiere una presión diferente para ser accionado.

Con todos los componentes que se requiere para fabricar una unidad de este tipo,es obviamente mucho más caro que los de membrana, pero también los convierten en una opción muy robusta y agradable al tacto, pero puede que algo ruidosos. Tienen una vida útil de 50.000.000 de pulsaciones, unas diez veces más que los de membrana.

Podéis ver varios ejemplos de su funcionamiento a continuación.

Últimamente hay diferentes marcas que están comenzando a fabricar este tipo de switches. Pero sin duda la más conocida y extendida son los Cherry MX. Dentro de estos tenemos diferentes “sabores” cada uno para contentar a cada tipo de usuario.

Cherry MX Black: Es de los más duros, se necesitan alrededor de 60 gramos para activarse, por lo que suele ser ideal para evitar la doble pulsación. Tiene un tacto lineal, manteniendo constante la fuerza durante todo el recorrido. Debido a que no tiene respuesta auditiva ni táctil que digan al usuario que se ha registrado la pulsación y por la dureza de su muelle, tendremos tendencia a pulsar hasta el fondo la tecla, especialmente con violencia, por ello no suele ser el más recomendado para los que se quieren iniciar en el mundo de los mecánicos. Por experiencia he comprobado que puedo escribir mucho más rápido con este switch, puesto que no “da miedo aporrearlo” consiguiendo así mayor agilidad.Especialmente útil para gamers de FPS.

Cherry MX Brown: El todoterreno de los Cherry MX sirviendo perfectamente tanto a jugones como para escribir. Tiene respuesta táctil a mitad de recorrido donde se registra la activación de la tecla. Tiene un tacto mucho más suave que el Black. Debido a la respuesta táctil no tiene la sensación de lineal, pero sigue siendo muy cómodo. El más recomendado en todos lo foros para los que se quieren iniciar en este mundillo. Personalmente los encuentro algo aburridos, prefiriendo los Black, pero ya es cosa de gustos.

Cherry MX Red: Es el referente en cuando a suavidad, muy similar al Brown para tener una referencia, pero siendo lineal, por lo que de la misma manera que los Black, los red no tienen sensación táctil ni el clásico click. Al ser un switch muy suave, sin feedback alguno, puede llevar a cometer bouble-tap a usuarios inexpertos, pero es de los más recomendados para los gamers. La mayoría de teclados orientados a este sector montan esta clase de switches.

Cherry MX Blue: Otro de los más extendidos en el mundo gamersin duda. Se caracterizan por ser tener respuesta táctil además de hacer click en el momento de activación, por lo tanto no son lineales. También por esta misma razón son los más ruidosos de toda la gama. Es el que menos resistencia tiene de activación. Personalmente aunque a primera vista son los más divertidos, no me gusta nada esa sensación de click que me recuerda a los teclados de membrana.

Cherry MX Clear: Es un switch no lineal, con respuesta táctil y alta dureza. En resumidas cuentas es un Brown con la dureza de los Black. Este en particular no es de los más comunes, pero lo pongo por una buena razón, y es que es el mejor para escribir. Es un switch duro que permite e incita al “aporreo”, pero con una respuesta táctil para aquellos que les gusta esa sensación. Es uno de los más raros de encontrar.

Fuente:

Además de todo esto, se han popularizado los teclados con iluminación LED en cada tecla, con ajustes de intensidad y de color.

Incluso con mini pantallas OLED en cada tecla, convirtiendo el teclado en totalmente personalizable. Un buen ejemplo es el teclado Optimus.

  • Marcel Lundberg
  • June 02,2022

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